Por esas casualidades de la vida, el día de hoy me encontré con una noticia del Diario La Nación, titulado “Chile, una nación de piratas” (3 de febrero de 2010) [1]. De acuerdo a este artículo, Chile sería el país con mayor cantidad de piratería entre todos los países de la OECD. Es así que, de acuerdo a dicha nota de prensa, la piratería de software en Chile alcanzaría un 67%.
El problema de esta nota es la fuente de la misma: quien hace el estudio y presenta esta cifra es la Business Software Alliance (“BSA“), una asociación gremial que representa a los principales productores de software del mundo cuya principal actividad es combatir la piratería de sus productos y hacer lobby con miras a obtener una protección más estricta de los derechos de propiedad intelectual. Es por lo mismo que la seriedad del estudio efectuado por ellos y difundido por La Nación es más que dudoso.
Y eso, ni siquiera lo digo yo. En efecto, no es casualidad que publicaciones tales como The Economist, hayan criticado abiertamente la seriedad de los estudios de la BSA, por faltar a la verdad [2].De ahí que me surge unas cuantas dudas en torno al profesionalismo del Diario La Nación en la selección de las fuentes. En efecto, de la redacción de las dos notas de prensa (y de sus títulos), hay un claro intento por mostrar estas cifras como ciertas. Además, no existe ninguna entrevista a personas que puedan presentar algún punto de vista distinto en torno a lo difundido por la BSA. Mucho menos se encuentra en dichas notas algún análisis crítico por el diario en torno a la cuestionada seriedad de los estudios de la BSA ni se reporta que diversos medios cuestionan seriamente la calidad e intención de tales estudios. Eso implica una de las dos siguientes cosas: (1) la nota de prensa fue pagada -y redactada- por la BSA, lo implica que La Nación está faltando a la ética profesional o (2) Simplemente no existió ningún nivel de investigación en torno al tema, lo que refleja una negligencia y desidia inexcusable. Como sea, ninguna de las dos hipótesis habla bien de La Nación.
En fin, por lo mismo, cabe preguntarse hasta qué punto es cierto que nuestro país tenga niveles de piratería tan alto. En realidad, sabemos que en Chile existe piratería (como en todas partes del mundo) pero NO sabemos si acaso en Chile esta práctica es tan generalizada como muchas veces se ha afirmado. Hasta donde tengo noticia, no existen estudios de organismos independientes que hayan hecho un estudio profundo sobre la materia. Creo que solamente partiendo con investigar y saber cuál es la realidad en dicha materia es que podemos tomar las medidas adecuadas.
Por el contrario, no podemos asumir como una realidad los estudios realizados por grupos de interés tales como la BSA o la Sociedad de Derechos de Autor. Solo de esta manera que podemos generar mecanismos eficaces y eficientes a fin de establecer políticas públicas relacionadas con el incentivo y protección de la creatividad e innovación en Chile.
FERNANDO FERNÁNDEZ ACEVEDO
Consejero ICDT
_____________________________________________
[1] Curiosamente, una noticia prácticamente idéntica publicó el mismo diario el día anterior. Véase, LA NACIÓN, ‘Chile el país más pirata del software’, 2 de febrero de 2009.
[2] THE ECONOMIST, ‘Software piracy: BSA or just BS?, Software theft is bad; so is misstating the evidence’, 19 de mayo de 2005. Véase también ZDNet, ‘Lies, damn lies and statistics”. 24 de junio de 2005.